Zonas erógenas masculinas

Las zonas erógenas masculinas que yo he encontrado son:
1. Los ojos (después del pito, la más importante)
* Cerebro (se me olvidó ponerle número)
2. Las orejas
3. La nuca
4. El cuello
5. La barba (prueben dando mordiditas)
6. Axilas
7. Pezones (que ricos)
8 y 9. Interior de los brazos.
10. Espalda
11. Vientre
12. Pompas
13. Ano (ahí está la próstata, aunque no les guste aceptarlo)
14. Pene
15. Dedos de las manos (fálicos y perfectos para ser estimulados)
16. Escroto (testículos)
17. Muslos
18. Dedos y planta del pie (igual de fálicos pero con más cosquillas)
19. Interior de las piernas.


oK. Esta página no es sólo una página para conocer más sobre la sexualidad femenina, sino también la masculina, y éste post es excelente para darle la introducción al simple (pero complicado por las mujeres) mundo sexual masculino. La verdad, todo lo que escriba sobre hombres es información recabada en base a experimentación de campo, así que bueno, ojalá sirva y sea fiel a lo que ellos sienten.

Los hombres, en su mayoría, son un poco menos complicados en cuanto a las áreas en las que les gusta ser estimulados (exceptuando el ano). Pueden excitarse y estimularse a través de una película pornográfica, una vieja voluptuosa o el simple treke-treke de su propio pito. Por ello que los ojos sean una de sus zonas más erógenas.

¿Y por qué el ano es una zona muy complicada? Simple. La estimulación anal en el hombre tiene connotaciones homosexuales muy fuertes, y debemos recordar que vivimos en una sociedad heterosexual un tanto reprimida y conservadora. El hombre heterosexual, aunque acepta que la próstata (localizada cerca del ano) es una de las partes que si estimuladas correctamente, puede hacerlo llegar a una eyaculación, no acepta que se le estimule directamente, aunque quien quiera estimularlo sea una mujer.

En mi ir y venir y encontrarme con hombres, sólo me he topado con uno que aceptaba de viva voz que aunque no tenía nada que ver con el mundo homosexual, le gustaba que lo estimularan por el ano. Al principio me llevé una sorpresa un poco extraña, ya que yo también relacionaba la estimulación anal con el principio homosexual, pero él me explicó: me gusta que me metan un dedo por el culo pero no me gustan los hombres. Cosa que con el tiempo, logré entender.

En fin, para no repetir conceptos, muchachas, sólo acuérdense que al igual que con nosotras, el hombre se aburre de los mismos estímulos, así que varíenle y exploren. Yo "descubrí" estas áreas, pero como en todo, es relativo y habrán muchas más que no haya expresado.